2. ¡Limpie periódicamente las puntas de contacto!
Los tipos de cabeza en punta se pueden limpiar con almohadillas de limpieza. Los restos acumulados en otros tipos de cabeza se pueden retirar con un cepillo o pincel. Partículas de suciedad, como restos de soldadura o fundente, se adhieren al cabezal del émbolo y pueden originar una mayor resistencia o errores ficticios. Sin embargo, a la hora de limpiar con pincel es necesario proceder con mucho cuidado. La carga lateral aplicada a una punta durante la limpieza puede causar deformaciones permanentes en el émbolo. Por este motivo, no se deben usar pinceles con cerdas de metal. En estos casos, es útil contar con la almohadilla de limpieza de contacto adecuada, que se corta según las medidas de la muestra y se coloca en la muestra, en lugar del adaptador. Al cerrar el adaptador de prueba, las puntas de contacto pinchan la almohadilla de limpieza. La composición específica de la almohadilla de limpieza de contacto genera un efecto limpieza. En caso de suciedad persistente, el proceso se puede repetir varias veces.